Por Julio Requena.
Las autoridades educativas del Estado de México están convencidas de cavar su propia tumba, pues están contribuyendo a darle fin al régimen priísta en la entidad entregando en este momento preelectoral la basificación de plazas magisteriales federales en conjunto con el SNTE, organización sindical cuya meta es fortalecer al Partido Nueva Alianza en el ámbito local para que no pierda su registro, pero curiosamente este partido hará equipo con MORENA para jubilar al PRI en las elecciones intermedias.
Gerardo Monroy titular de Educación y Guillermo Legorreta, responsable de SEIEM anunciaron con bombo y platino la basificación de más de 9 mil docentes en presencia de los líderes sindicales naranjas del Valle de Toluca y del Valle de México, lo que no saben es que de inmediato esta acción se comunicó como una forma de fortalecimiento de la estructura de Nueva Alianza, celebrando anticipadamente el golpe que representará para los candidatos priístas.
Sin embargo, este comunicado no cayó como lo esperaban, pues los profesores están convencidos de votar por MORENA y saben que la basificación es un derecho ganado por el trabajo que realizan en las escuelas o centros de trabajo y no por los líderes sindicales del SNTE quienes en el sexenio de Enrique Peña Nieto aceptaron su perdida casi de rodillas a cambio de privilegios personales.
Se alimenta un monstruo que no saben quién controla y que tanto dañará al sistema, pues los líderes charros del SNTE están envilecidos de poder y usaran ese beneficio para llevar agua a su molino individual, pues hay una disputa enorme por las plurinominales de Nueva Alianza, parte de la estructura quiere entregar buenas cuentas a MORENA y una parte más, quiere fortalecer el proyecto de Redes Sociales Progresistas.
Lo cierto es que quien entrega la basificación es un gobierno priísta, al que nadie del magisterio desea apoyar. Quizá los funcionarios de Educación y SEIEM se engañan pensando que con estas acciones están recuperando la base social del PRI, pero nada más lejos de la verdad, dado que esos maestros federales están listos para asumir o apoyar un gobierno de izquierda y trabajarán para que en 2023 haya un cambio en la gubernatura jubilando el viejo régimen.
Una vez entregadas las bases ni este gobierno ni la futura administración podrán quitarlas pese al sentido de la votación. La gran duda es quién acaba de comprar esos casi 10 mil votos, el PANAL, Redes Sociales Progresistas o MORENA, pues así como se hizo el anuncio oficial de la parte gubernamental mexiquense, se prepara un comunicado federal de respaldo al magisterio por parte de la Cuarta Transformación que en resumen dirá: “Andrés Manuel López Obrador cuida y vela de la estabilidad laboral de los maestros”.
El gobierno del Estado de México ya ha perdido otras batallas mediáticas como las jornadas de Vacunación, donde algunos ayuntamientos y en general el Gobierno de AMLO le han ganado terreno en las simpatías de la ciudadanía, al grado de que ni el logo ni el nombre mexiquense aparece en el gusto del público.
PARA EL LIBRO DE CIVISMO… Un tema que ha levantado muchos comentarios es la investigación sobre el Salario Rosa por parte del Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México (OSFEM), al parecer al gobierno estatal se le están juntando las deudas y los temas escabrosos antes de la elección intermedia.
El secretario de Desarrollo Social ya prometió subsanar las observaciones en los 30 días que le confiere la ley y posiblemente esté tema todavía esté vigente en la contienda si la parte gubernamental no lo sabe cerrar a tiempo.