Aunque Enrique Vargas insiste que es el aspirante mejor posicionado para encabezar la alianza, lo cierto es que deja muchas dudas que eso sea cierto.
Para empezar, la Alianza. En este tema, el diputado priista Guillermo Zamacona afirmó que es muy probable que se mantenga en la elección para gobernador dentro de un año y medio, lo que sin duda haría más competitivo al candidato que la encabezara.
Pero también dejó en claro que Enrique Vargas no sería la mejor opción, a pesar de promocionarse en todo momento para alcanzar esa posición.
Para empezar, el diputado integrante de la bancada tricolor destacó que es necesario analizar el trabajo que hizo en la Presidencia Municipal de Huixquilucan, y que no cuenten únicamente las encuestas, que todo apunta a que las mandó hacer a modo.
Luego y lo más importante, la diferencia de votos que obtuvo el PAN y el PRI en la elección intermedia.
Es imposible que la alianza sea encabezada por el integrante de un instituto político que obtuvo menos votos. Y es que mientras el PRI obtenía más de un millón 600 mil votos, para el 26% de la votación; en el caso de Acción Nacional le alcanzó para más de 823 mil y el 13.15%.
Baja ésta óptica, al PAN le resultaría complicado encabezar la Alianza, con todo y que los municipios más importantes fueron ganados por el blanquiazul.
Por otro lado, Zamacona Urquiza estima que un aspirante debe tener una imagen ejemplar, algo que sería un problema con Vargas del Villar, sin contar con el hecho de que seguramente la autoridad electoral podría investigar si la portada donde sale el líder panista en la Legislatura se considera o no un acto anticipado de campaña.
En resumen, la alianza rumbo a la elección de Gobernador es un tema a considerar. Que el candidato sea Enrique Vargas, se antoja lejano y muy complicado, casi imposible.