Por Gan Dallas e Intelecto
Mientras el edil con licencia de Huixquilucan y hoy candidato a diputado local plurinominal Enrique Vargas presume la plusvalía en la zona residencial y hasta inventa reconocimientos de candidatos opositores, su esposa, heredera y candidata a la alcaldía, Romina Contreras presume propuestas que solo buscan administrar la pobreza de un municipio de contraste con la zona residencial.
Esta semana, hubo señalamientos del aspirante morenista Enrique Garay, sobre que la brecha entre ricos y pobres de este municipio es abismal, por la diferencia en calidad de servicios, seguridad y acceso a oportunidades, resultado de las apariencias creadas por el mal gobierno panista.
Y la candidata blanquiazul a la alcaldía, en sus recurridos promete otorgar apoyos económicos, con la TARJETA JOVEN, a madres solteras con la TARJETA AZUL y a mujeres adultas mayores, con la TARJETA PLATEADA, una vez que llegue al gobierno municipal, pero la realidad es que es una política de compra de voluntades y del voto.
En Nuevo León, la Fiscalía General de la República ya investiga al candidato de la Alianza PRI-PRD, Adrián de la Garza, por presunta compra y coacción del voto por solicitar el voto femenino a cambio de la Tarjeta Rosa que obtendrían una vez que gane las elecciones.
Así, en el Estado de México, la FGR debería iniciar ya una investigación a la panista Romina Contreras por estar ofrecer como promesa de campaña tarjetas con recursos económicos para grupos vulnerables si la convierten en alcaldesa a cambio les promete dádivas por su voto.
Con estas promesas, la candidata panista, muestra que seguirá el mismo camino que su esposo quien será diputado por vía plurinominal y tiene la ambición de llegar a la Gubernatura, para solo administrar la pobreza en la zona tradicional y popular de Huixquilucan, en lugar de proyectos integrales que propicien el crecimiento y desarrollo de sus habitantes.
La creación de empleos y oportunidades para los que menos tienen, pero la política de dominación indica que los pobres deben permanecer pobres y a expensas de los personajes pudientes y recibir las migajas que les tiren. Esta es la política que ofrecen los candidatos del PAN en Huixquilucan, donde los contrastes de roqueza y pobreza ofenden.